Para los pacientes con diabetes fumar cigarrillos aumenta el riesgo de enfermedad cardiovascular y de accidente cerebrovascular, además fumar aumenta la resistencia a la insulina y presente complicaciones asociadas como la nefropatía diabética, retinopatía, neuropatía y amputaciones de extremidades inferiores. En definitiva dejar de fumar en un paciente con diabetes debería ser una prioridad, pero según recientes estudios llevados a cabo por Centros para el Control y la Prevención de Prevención de Enfermedades Crónicas en Atlanta, Estados Unidos, eso parece más complicado de lo que a priori pensamos.
A pesar de gastar más esfuerzo para dejar de fumar, la disminución de la prevalencia del tabaquismo fue menor en la población con diabetes que en la población en general. Los adultos con diabetes fumadores han intentado dejar de fumar en ese período de tiempo un 13% más de veces que los pacientes sin la enfermedad en un estudio que se ha llevado a cabo en los últimos nueve años en Estados Unidos.
Aunque las autoridades médicas insta a los fumadores con diabetes a dejar de fumar, los datos de 1990 a 2001 son contundentes y muestran que la prevalencia del tabaquismo en general ajustada por edad entre las personas con la enfermedad se mantuvo sin cambios, a pesar de una reducción significativa en el consumo de cigarrillos en la población general durante el mismo período de tiempo. Es decir, muchas personas entendieron que había que dejar de fumar, pero el colectivo de pacientes con diabetes fumadores no pensó lo mismo.
«El diagnóstico de una enfermedad crónica como la diabetes puede aumentar las probabilidades de dejar de fumar y producir un mayor deseo de dejar de fumar,» aseguran los investigadores de los Centros para el Control y la Prevención de Prevención de Enfermedades Crónicas de Atlanta. «Sin embargo, la investigación también sugiere que los fumadores con diabetes tienen menos activos en su autocuidado y manejan peor su diabetes. Además, pueden ser más propensos a sentimientos de depresión que los no fumadores con la enfermedad y tienen una disposición baja para dejar de fumar».
En la investigación sobre los hábitos para dejar de fumar los investigadores utilizaron datos del Sistema de Vigilancia de Factores de Riesgo del Comportamiento (2001-2010) para examinar las tendencias de la prevalencia de tabaquismo y los intentos de abandono entre los adultos estadounidenses con y sin diabetes.