Los expertos hablan claramente de las tres últimas décadas como el período de tiempo en el que se ha producido un fuerte aumento del sobrepeso y la obesidad infantil. Un 5% de la población infantil española está muy mal alimentada y un 55% bastante regular según estudios recientes. Es decir, según los datos, el 60% de los menores de edad en España no come bien. Esto tiene una consecuencia directa en la salud que es la obesidad. Los casos de obesidad infantil en nuestro país ya superan a los de Estados Unidos. Una situación que se está plasmando día a día en centros médicos como el que dirige Elisa. Elisa Escorihuela es nutricionista y en los últimos meses ha visto como los casos de niños con obesidad infantil se han multiplicado considerablemente.
Son las consecuencias que cabe esperar si las familias siguen alimentando así a sus hijos. En un futuro muy cercano la obesidad infantil provocará un aumento de enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, lo que se traducirá a su vez en una reducción de la esperanza y la calidad de vida de estas personas.
Los expertos como la nutricionista Elisa Escorihuela recuerdan que “los niños tienen unas necesidades nutricionales mucho más específicas que los adultos y si no se alimentan bien, a parte de poder desarrollar una obesidad infantil, tienen déficits alimenticios y riesgo alto de contraer enfermedades metabólicas”
En centros infantiles como el de Peucos en la ciudad de Valencia, el problema de la obesidad infantil y la buena alimentación están muy presentes. Aquí se apuesta por un menús tradicionales y completos, con los alimentos básicos para mantener una vida saludable y crecer con garantías. Adela Rey es la responsable del centro infantil Peucos. Ella sabe que las dietas de los más pequeños de la casa deben tener mucho color, como recomiendan los nutricionistas. Legumbres, fruta, verduras, cereales, pescados y carnes deben componer la base de la pirámide alimenticia de los más peques, y sin duda es la receta ideal para combatir la obesidad infantil.
Otra de las causas del crecimiento de la obesidad infantil en España es el estilo de vida actual. En general las familias, con sus progenitores en el mercado laboral unido al ritmo frenético al que vamos, se han olvidado de la elaboración y selección sana de las comidas. Se opta muchas veces por los precocinados o alimentos de rápida ingesta olvidando en muchos casos la necesidad de alimentarse con calma y paciencia. Para los más pequeños ese proceso es un aprendizaje que tiene consecuencias no sólo presentes sino a futuro.
Educación y formación. Esas son las dos herramientas claves, según los nutricionistas y pedagogos para dejar de estar a la cabeza de la obesidad infantil en Europa y evitar complicaciones médicas en el futuro. Una labor en la que tenemos que estar implicados todos y cada uno de nosotros,