El próximo 14 de noviembre se celebrará el Día Mundial dela Diabetes, enfermedad que va estrechamente ligada a la salud de los pies. Como demuestran los últimos estudios, el 15% de las personas que padecen esta enfermedad desarrolla lesiones en los pies.

Por este motivo, desde el Ilustre Colegio de Podólogos de la Comunidad Valenciana(ICOPCV) han reivindicado que es fundamental incluir esta rama sanitaria dentro de los Servicios de Salud Públicos con la finalidad de ofrecer un tratamiento médico de calidad a las personas que lo padecen.

 genera un importante coste para el paciente, el sistema de salud y la sociedad, por su alta prevalencia, incidencia y complicaciones. Además, es la principal causa de amputaciones no traumáticas en nuestro país. La inclusión del podólogo en el sistema sanitario público reforzaría la detección precoz y permitiría el tratamiento de los factores de riesgo, úlceras y neuropatías (pérdida de sensibilidad) principalmente, ayudando a prevenir y curar numerosos casos sin tener que tomar medidas extremas.

“Se ha demostrado que a través de la podología preventiva  se pueden evitar en torno al 80% de los casos de riesgo de amputación, una cifra muy elevada que repercute enormemente en una reducción de los costes hospitalarios, sociales y personales, que conlleva esta intervención”, ha indicado el Presidente del Colegio de Podólogos dela Comunidad Valenciana.

A través de tratamientos con quiropodias (eliminación de durezas), plantillas a medida, ortesis de siliconas, tras un estudio biomecánico adecuado, se consigue prevenir la aparición de úlceras y de las complicaciones derivadas de ésta.

Es muy importante que las personas que padezcan pie diabético utilicen un calzado adecuado, cuiden especialmente la higiene de sus pies y los hidraten a diario para evitar la sequedad, la aparición de fisuras, úlceras o infecciones. Además, hay que ser especialmente cuidadoso, conforme la enfermedad va evolucionando en los años porque directamente afecta a los pies.

Por este motivo, es aconsejable que se realicen exploraciones visuales para comprobar que no hay lesiones y visitar periódicamente al podólogo porque las hiperqueratosis (callosidades) deben ser tratadas por él y nunca por el paciente porque podría provocar otras complicaciones e, igualmente, se recomienda que las uñas sean cortadas por un profesional para evitar lesiones en los dedos como uñas encarnadas, infecciones o hematomas subungueales.