El pleno de la Eurocámara ha aprobado este miércoles una resolución en la que defiende la creación de una estrategia comunitaria contra la diabetes para mejorar la investigación y aumentar la prevención y el diagnóstico precoz de esta enfermedad, que afecta a 32 millones de europeos.

La resolución, aprobada a mano alzada, urge a las instituciones comunitarias a financiar la investigación de la diabetes a través de los programas marco de investigación de la UE. También reclama que se consolide la colaboración entre países en ese ámbito. Para conseguirlo, el Parlamento reclama a la Comisión que presente criterios de armonización y métodos de recogida de datos.

Los eurodiputados solicitan además que la UE y los Estados miembros utilicen las políticas medioambientales, alimenticias y de consumo para combatir los factores de riesgo para contraer esta enfermedad, como por ejemplo la obesidad.

En este sentido, piden a los Gobiernos que garanticen que los menores reciben información sobre los beneficios de la alimentación saludable y el ejercicio físico en las escuelas.

Finalmente, el Parlamento quiere que el diagnóstico precoz sea una de las prioridades de las autoridades sanitarias, ya que a menudo la diabetes se diagnostica demasiado tarde, lo que acarrea consecuencias muy negativas para la salud.

La diabetes causa hasta 325.000 muertes anuales en Europa. Además de los 32 millones de afectados en la UE, se estima que otros 32 millones de personas sufren intolerancia a la glucosa, un trastorno que tiene muchas posibilidades de acabar derivando en diabetes. Aunque, aproximadamente la mitad de los enfermos no han sido diagnosticados, la diabetes consume el 10 por ciento el gasto sanitario europeo, según los datos difundidos por la Eurocámara.

El total de afectados aumentará un 16,6 por ciento hasta 2030 a causa de la epidemia de obesidad, el envejecimiento de la población y otros factores. La diabetes de tipo 2 es la más habitual y afecta a un 90 por ciento de los casos. Sus causas principales son una mala alimentación, el sobrepeso y un estilo de vida sedentario.

Según un estudio elaborado por el Gobierno español junto con la Asociación Española de Diabetes, el año pasado un 7,8 por ciento de los españoles mayores de edad seguía tratamiento médico contra la diabetes de tipo 2, a lo que hay que añadir otro 6 por ciento que padecía la enfermedad sin saberlo. Esto eleva la cifra de diabéticos hasta un 13,8 por ciento de población del país, aproximadamente cuatro puntos por encima de la media comunitaria.