Un nuevo estudio publicado en la revista Sleep Medicine confirma la relación directa y el riesgo que hay entre la apnea del sueño y la diabetes tipo 2. Los hallazgos apoyan las recomendaciones de la Federación Internacional de Diabetes de que los pacientes con apnea del sueño deben ser examinados para prevenir el riesgo de diabetes tipo 2.

La apnea del sueño se produce cuando las vías respiratorias de una persona se bloquean parcial o completamente durante el sueño, y como resultado, la respiración se interrumpe. Alrededor del 13 por ciento de los hombres y el 6 por ciento de las mujeres tienen apnea del sueño.

«En las últimas dos décadas, la evidencia científica se ha ido acumulando en torno a que la apnea del sueño puede estar asociada con la resistencia a la insulina, la intolerancia a la glucosa y la diabetes tipo 2», según investigador Mako Nagayoshi de la Universidad Facultad de Ciencias Biomédicas de Nagasaki.

Estudios anteriores que relacionan la apnea del sueño con la diabetes tipo 2 fueron tenidos en cuenta en el inicio de la investigación del investigador Nagayoshi y sus colegas.

Condiciones del nuevo estudio apnea y diabetes tipo 2

Para el nuevo estudio, se utilizaron datos de 1.453 participantes, con una edad media de 63 años. Todos los participantes se sometieron a estudios del sueño en el hogar y no tenían diabetes cuando comenzó la investigación. En la muestra se encontraban personas con condiciones de sueño normales o con apnea del sueño leve, moderada o grave.

Después 13 años, 285 personas desarrollaron diabetes tipo 2. Las personas con apnea severa del sueño tuvieron un 70 por ciento más probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2 que aquellas clasificadas como normales. El aumento del riesgo se mantuvo incluso cuando los investigadores sólo incluyeron personas que eran obesas.

Aproximadamente uno de cada 10 adultos tienen diabetes, según la Organización Mundial de la Salud. La mayoría tienen diabetes tipo 2, que ocurre cuando el cuerpo no puede producir suficiente insulina.

La obesidad aumenta el riesgo tanto de la apnea del sueño como de la diabetes tipo 2.

El nuevo estudio y la investigación del pasado sugieren que existe una relación directa entre la apnea obstructiva del sueño y la diabetes tipo 2, pero la evidencia irrefutable todavía no existe.

Estos resultados ponen de relieve la necesidad de prevenir la apnea del sueño y prevenir el riesgo de desarrollar diabetes. Los comportamientos tales como el mantenimiento de peso saludable o la reducción de la vida sedentaria previenen la posibilidad de desarrollar apnea del sueño y diabetes tipo 2.

La investigación sigue en curso y aún se está investigando si el tratamiento de la apnea del sueño reduce el riesgo de diabetes tipo 2.