La Agencia Española del Medicamento (AEMPS), dependiente del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, ha autorizado en el Sistema Nacional de Salud (SNS) el uso de canagliflozina, registrado por Janssen con el nombre de ‘Invokana’, para el tratamiento de la diabetes tipo 2. Así lo han anunciado esta semana el director de Government Affairs y Desarrollo de Negocio de Janssen, Antonio Fernández; la doctora del servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital General Universitario Gregorio Marañon, Susana Monereo; y el especialista en Endocrinología y Nutrición de la Clínica Universidad de Navarra, Javier Salvador.
Todos ellos han destacado los importantes beneficios que aporta Invokana ya que, además de favorecer la eliminación de la glucosa a través de la orina, consigue reducir el peso y las cifras de presión arterial. Y es que, tal y como han recordado los expertos, la diabetes tipo 2 suele cursar con otras patologías como, por ejemplo, la obesidad o la hipertensión.
«La incidencia de diabéticos tipo 2 se ha duplicado en los últimos años, entre otros motivos, por el aumento de la incidencia de la obesidad y sobrepeso. De hecho, se ha comprobado que ya el 60 por ciento de la población española sufre exceso de peso. En este sentido, es clave combatir la obesidad para conseguir prevenir la diabetes tipo 2, ya que otro de los problemas de la diabetes tipo 2 es que al comienzo no presenta síntomas», ha recalcado Salvador.
Estas declaraciones han sido corroboradas por la doctora Monereo, quien ha informado de que actualmente existen siete clases diferentes de tratamiento para la diabetes tipo 2 y ha destacado los beneficios que aporta ‘Invokana’, porque se trata de una nueva clase terapéutica, los inhibidores del transportador sodio-glucosa tipo 2. En concreto, canagliflozina actúa, con un mecanismo de acción independiente de la insulina, bloqueando la reabsorción de la glucosa a través del riñón y aumentando la
eliminación de esta a través de la orina. Para ello, la glucosa es filtrada desde la sangre a los riñones y, posteriormente, es reabsorbida de nuevo al flujo sanguíneo, realizándose mayoritariamente a través del transportador sodio-glucosa tipo 2.
El tratamiento con Invokana, de administración oral, está indicado para aquellos pacientes con diabetes tipo 2 que no responden a terapia de primera línea de elección, la metformina, para controlar los niveles de glucosa y, según ha informado Monereo, lo ideal sería empezar a utilizarlo al principio de la enfermedad. «Disminuye la glucosa de forma importante y prolongada, baja la tensión y ayuda a controlar el peso porque elimina el azúcar por la orina», ha recalcado la experta.
Finalmente, Fernández ha señalado que hasta ahora los tratamiento contra la diabetes tipo 2 eliminaban la glucosa en sangre pero la almacenaba, formando lípidos y, por ende, aumentando el índice de masa corporal del paciente.
Concretamente, los resultados del programa clínico internacional fase III, que incluye la realización de 9 estudios con 10.285 pacientes, mostró que tanto a dosis de 100 miligramos como en 300 miligramos mejoraba el control glucémico, y, a una dosis de 100 mg se reducía el peso un 5,2 por ciento y la presión arterial. En el caso de la dosis de 300 mg la disminución del peso fue de 3,5 kilogramos.