La COVID-19 condiciona el congreso de la SED que arranca este domingo por varios motivos. En primer lugar porque la actual situación de estado de alarma en España provocada por la pandemia de coronavirus, y las limitaciones para la celebración de congresos médicos, ha motivado que la Sociedad Española de Diabetes (SED) convierta su cita congresual anual de carácter presencial en un evento virtual. Pero además porque en la presentación del congreso esta mañana se ha alertado de los problemas que esta pandemia ha provocado y va a provocar en el retorno a la realidad.
La COVID-19 y diabetes
Obviamente el programa ha tenido que adaptarse al interés y situación sanitaria actual. La conferencia de clausura, que protagonizará el Dr. Fernando Rodríguez Artalejo, abordará el tema de «Estilos de vida, factores cardiometabolicos y COVID-19«. Y es que, como recuerda el Dr. Merino, “sin duda, esta enfermedad se asocia con un peor pronóstico cuando afecta a personas con diabetes, y especialmente si se asocia obesidad. Esto nos obliga a ser más insistentes si cabe en estos aspectos educacionales dirigidos a la población general, y hemos de potenciar hábitos que faciliten el normopeso, el aumento de actividad física y la dieta saludable”.
La diabetes es una de las comorbilidades más frecuentes en personas con la COVID-19. Aunque la prevalencia varía ampliamente según las series publicadas entre el 7 y el 30%, la presencia de diabetes no parece aumentar el riesgo de infección, pero sí empeora el pronóstico de la misma. “Una vez adquirida la COVID-19, la diabetes aumenta la gravedad y mortalidad de la enfermedad de forma que los pacientes con diabetes y/o hiperglucemia no controlada tienen más del doble de probabilidades de ser ingresados en unidades de cuidados intensivos y la mortalidad es hasta tres veces mayor en comparación con los pacientes sin diabetes y/o hiperglucemia no controlada”, indica el Dr. Antonio Pérez Pérez, presidente de la SED.
Incluso, se cuentan ya con evidencias que sugieren como la COVID-19 podría desencadenar la aparición de diabetes en personas que no tenían esta enfermedad. Como explica el máximo responsable de la SED, “se ha descrito un posible daño directo al páncreas del virus que causa la COVID-19 (SARS-CoV-2), que podría empeorar la hiperglucemia, o incluso inducir la aparición de diabetes transitoria o definitiva”. En opinión del Dr. Antonio Pérez, “es posible que el coronavirus SARS pueda penetrar en los islotes pancreáticos y dañar las células beta, lo que produciría una deficiencia de la secreción de insulina. Esta disminución de la insulina secretada conduciría a un agravamiento de la diabetes en las personas con diabetes previa e inducir hiperglucemia aguda incluso en personas sin diabetes”. En cualquier caso, según matiza este experto, “el conocimiento actual sobre esta forma nueva de diabetes es muy escaso y debemos esperar los resultados de nuevos estudios que permitan definir los mecanismos y el curso en el tiempo de la hiperglucemia inducida por el coronavirus SARS”.
Impacto de la COVID-19 en la atención de la diabetes
Con todo, según el Dr. Alfonso Luis Calle Pascual, presidente del Comité Organizador del Congreso, “en esta incertidumbre ‘crónica’ que nos está envolviendo debemos plantearnos el futuro del Sistema Sanitario Publico en lo que respecta a la actividad no vinculada la COVID-19”. Y es que, como denuncia este experto, “estos tres últimos meses sin actividad asistencial programada para las patologías crónicas, en particular para las personas con diabetes, puede colapsar el sistema”; de hecho, asegura que “más del 60% de los profesionales de Endocrinología, y en determinados centros más del 80%, se han dedicado exclusivamente a la atención a los pacientes afectados por la COVID-19”.
Partiendo de este problema, el Dr. Calle admite que “va a ser dificilísimo retomar la actividad clínica habitual para personas con diabetes dentro de esta nueva normalidad, con unos servicios diezmados de personal (tanto médicos como enfermeras)”. Así, por ejemplo, la aplicación de los nuevos dispositivos de monitorización continua de glucosa, aprobados por el BOE para su financiación pública, van a sufrir un retraso estructural su aplicación por falta recursos humanos, fundamentalmente enfermeras educadoras. Antes de la pandemia, y por la escasez de recursos, los pacientes que debían haber recibido su sensor continuo antes de diciembre de 2019 lo esperan obtener a finales de 2021, al menos en alguna Comunidad, como por Madrid. Por eso, desde la SED se hace un llamamiento a las consejerías de Sanidad para que doten de recursos humanos imprescindibles a los servicios de Endocrinología y Nutrición, para poder abordar la atención a las personas con diabetes de forma adecuada y garantizar su calidad.
31 Congreso de la Sociedad Española de diabetes.
La cita congresual conserva un amplio abanico temático que abarca desde los incipientes estudios experimentales hasta la presentación de guías de práctica clínica, y desde conferencias magistrales con ponentes de prestigio mundial a encuentros monográficos con el experto que ponen al alcance de los asistentes temas de mucho impacto asistencial, como la fragilidad o los programas de educación terapéutica.
El encuentro virtual tendrá lugar del domingo 21 al martes 23 de junio, con más de un centenar de sesiones científicas y conferencias, y abordando los aspectos más novedosos, controvertidos y de actualidad en el ámbito de la investigación y clínica de la diabetes. El riesgo genómico en diabetes, el papel de la grasa ectópica, la regresión de la diabetes con modificaciones del estilo de vida, el páncreas artificial, los nuevos antidiabéticos con efectos cardio y nefroprotectores, el riesgo residual en DM2 o la vinculación del deterioro cognitivo y la diabetes son algunos de los principales temas que se abordarán en esta peculiar e innovadora cita científica y formativa.
Según destaca el Dr. Juan Francisco Merino Torres, presidente del Comité Científico, “hemos previsto un programa en el que se hace un repaso por los temas de mayor interés generados en el último año, incluyendo un análisis de la actual pandemia por COVID-19”.
Entre los temas más sobresalientes, este experto resalta las sesiones sobre el uso de telemedicina en la atención de la diabetes y la incorporación de nuevas tecnologías, así como la publicación de resultados prometedores con nuevos fármacos. “La telemedicina en diabetes va cogiendo cada día un mayor protagonismo, especialmente en el contexto que vivimos, y esto queda reflejado en el programa científico; y a esto se añaden las grandes aportaciones de los nuevos grupos terapéuticos, especialmente en cuanto a protección cardiovascular y renal”, señala el Dr. Merino