La peor de las consecuencias de un pie diabético es su amputación. Una complicación médica que cada vez se da con más frecuencia en nuestro país. La realidad española en los últimos años, de 2001 a 2008, en comparación con países de nuestro entorno similares en nivel económico y social, es que la tasa de amputaciones ha crecido considerablemente. Una afirmación que recoge la Dra. Ana López de Andrés en un informe publicado en la revista Diabetes Care.
El pie diabético en España
Pero, ¿por qué ocurre esto? Expertos reunidos a mediados de abril en el Congreso Nacional de Diabetes celebrado en Sevilla, aseguran que la situación se produce porque no se está aplicando en España el consenso médico en torno al pie diabético, al que profesionales sanitarios internacionales llegaron en el año 1999.
Esta hoja de ruta del pie diabético que se ha ido versionando en los últimos años hasta en tres ocasiones se centra en tres aspectos fundamentales para evitar la peor de las consecuencias, la amputación. En primer lugar reconocer que el manejo de un pie diabético es una patología compleja. Tan compleja que necesita de la participación de diferentes profesionales sanitarios como médicos de familia, enfermeros y demás, y no sólo de podólogos. Y en tercer lugar, como todo cuando hablamos de diabetes, la prevención es una de las mejores armas para combatir los riesgos y problemas que se derivan de un pie diabético.
Según el doctor Jose Antonio Rubio del Hospital Príncipe de Asturias de Madrid, existen estudios que confirman que aplicando estos criterios el número de amputaciones de un pie diabético se reduce entre un 50 y un 85 por ciento.
Por tanto una de las primeras acciones que el colectivo de profesionales sanitarios debería poner en marcha es su sensibilización en torno a este problema. Una concienciación que debe ir avalada por el gestor médico, en este caso la administración sanitaria española que debería tomar cartas en el asunto para evitar los costes médicos y económicos de la amputación de un pie diabético.
Ideas propuestas para resolver el problema
Para ello el Dr. Rubio propone la creación de unidades especializadas en el pie diabético, la formación de los profesionales de atención primaria y los medios técnicos necesarios para tratar esta patología, así como los cuidados podológicos preventivos. Y es que en España no se hace una correcta prevención del pie diabético con controles podológicos. Entre otras cosas, porque el profesional, el podólogo, no forma parte del sistema sanitario. Lo curioso, según el Dr. Rubio, es que a pesar de que este profesional que puede prevenir las complicaciones de un pie diabético no se encuentra en el sistema sanitario, las complicaciones o amputaciones del mismo si están cubiertas en dicho sistema. Una situación que no tiene mucho sentido.
Sin duda las ideas y propuestas presentadas en el congreso de Sevilla van en la línea de mejorar esa atención médica concreta al paciente con diabetes y en evitar que el número de amputaciones continúe creciendo como lo ha hecho hasta ahora. Y no se trata de medidas costosas, sino eficientes.
Hola,
me parece bien que se quiera prevenir y reducir el elevado número de amputaciones debidas a la diabetes.
Pero me parece que el sistema sanitario hace las cosas muy complicadas, afirmando que es una patología muy compleja, que necesita multitud de especialistas, conferencias y seminarios al respecto, etc…
Puede ser más fácil y barato, si se está dispuesto a aprender de los conocimientos y experiencias de otras formas de medicina.
Por ejemplo, mi madre curó el pie con cangrena de mi abuelo justo antes de que los médicos se lo amputaran, gracias a unas cataplasmas de fenogreco puestas en las zonas del pie con heridas.
Me gustaría ver que el sistema sanitario, o al menos los médicos por su propio interés, se informaran más sobre otras posibles terapias más simples, menos intrusivas y mucho más baratas.
Saludos
Carlos González (diabético y autor)
Gracias por tu opinión, queda reflejada.
gracias
Excelente información, muy util para todos los que padecemos diabetes.
Felicidades,
Ricardo Salcedo
http://www.bigtoe.com.mx
Esto de los pies es como todo: no sólo no se mejorará, sino que se despreciará y jamás se abordará. Y si no, tiempo al tiempo.
Como transición hitleriana (llegar con vericuetos legales para implantar la tiranía) que estamos viviendo, lo que se está haciendo es desmantelar todo rastro de función social de lo público: enseñanza, sanidad, vivienda protegida…
Si no nos movemos, «día sí y día también», como mínimo a nivel continental, con huelgas y manifestaciones, y denuncias ante instancias superiores (en España está claro que todo «se lo pasan por el arco»), no podemos esperar que nada bueno se aplique a enfermos no ricos; de hecho, ya están muriendo muchísimas personas que ni siquiera deberían haber tenido complicaciones por sus accidentes y enfermedades. 🙁
Está todo pensado: se arruina todo => se dice que no sirve => se desmantela => todo privado: el crimen perfecto de los ricos, «genocidio completado». Pero «por la puerta de atrás», de forma más barata para ellos: dejándonos morir, en vez de matándonos en paredones o frentes de guerra como otras tantas veces. 🙁
Pienso que hay que tratar de evitar amputar,aunque sé qué se opta por lo más fácil en la antigüedad se utilizaban sanguijuelas para recuperar la circulación de la sangre y hoy con la tecnologia que tenemos imagino que podemos evitarlas.