El verano suele ser sinónimo de diversión, cambio de horarios, momento de algunos excesos, pérdida de rutina… Y también de dejar de comer bien. Sobre todo entre los niños y adolescentes. Según el Colegio Profesional de Dietistas-Nutricionistas de Madrid (CODINMA) “La adolescencia es una etapa de riesgo de excesos y deficiencias nutricionales” por lo que es fundamental establecer hábitos saludables para que este grupo crezca sano y fuerte.
La alimentación de un adolescente está marcada por factores como: las amistades, los medios de comunicación, la familia, las experiencias personales, los valores sociales… Así como: la imagen corporal, los conocimientos nutricionales, el desarrollo psicosocial y salud, las necesidades físicas…
Para lograr volver a comer bien, es fundamental educar y formar a estos grupos desde pequeños. Generar este tipo de hábitos desde una edad temprana, garantizará una mayor cultura alimenticia en ellos. Es necesario familiarizarles con alimentos como: las frutas, verduras, legumbres, cereales y huevos. Los Dietistas-Nutricionistas del CODINMA aconsejan preparar estos alimentos al vapor, a la plancha o al horno, utilizando al mismo tiempo condimentos, que resulten de su agrado.
Según la Pirámide NAOS propuesta por la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, para lograr una rutina alimenticia saludable deben consumirse a diario: verduras, hortalizas, cereales, frutas, productos lácteos y aceite de oliva; y varias veces durante la semana: pescados, huevos, frutos secos y legumbres.
Además de estos hábitos alimenticios, los Dietistas-Nutricionistas destacan otros factores que influyen a la hora de generar conductas de alimentación. Evitar dispositivos electrónicos mientras se esté comiendo, colaborar en hacer la compra y la preparación de las comidas.
Un gran número de adolescentes no sabe comer bien según lo que los expertos recomiendan. Ante cualquier duda sobre cómo comer bien, debemos acudir al dietista-nutricionista para generar el tratamiento nutricional necesario tanto en niños como en adolescentes.