Las amputaciones de miembros por diabete solían ser comunes para los diabéticos, pero nuevas investigaciones del gobierno estadounidense indican una notable declinación en ese procedimiento extremo, probablemente debido a mejor tratamiento de la diabete. La tasa ha caído en más del 50% desde mediados de la década de 1990, según el estudio más amplio sobre el tema.
Para los diabéticos de más edad, las amputaciones bajaron de más de 11 por cada mil a unos cuatro por cada mil, informaron el martes los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por sus siglas en inglés). Otros estudios sobre diabetes han revelado declinaciones en amputaciones de dedos de los pies, pies y piernas, aunque no tanto. «Lo que más me llamó la atención fue la magnitud de la mejoría», comentó el doctor John Buse, experto en diabete en la Universidad de Carolina del Norte que no participó en el nuevo estudio.
El informe fue difundido el martes por la revista médica Diabete Care. La diabetes es una enfermedad en la que se acumula azúcar en la sangre. Más o menos uno de cada 10 adultos en Estados Unidos la padece y es la séptima causa de muertes, dicen los CDC. Sus complicaciones incluyen una circulación deficiente y daños en los nervios de los miembros inferiores, lo que produce insensibilidad y cicatrización lenta de llagas e infecciones. Esto es más común en los pacientes ancianos y los que han tenido diabetes durante por lo menos 10 años.
Aunque la diabete ha aumentado más en Estados Unidos —impulsada por el tipo 2, relacionado con la obesidad-, los investigadores han notado declinaciones en algunas de las demás complicaciones más temidas, incluso ceguera e insuficiencia renal.
En el estudio, los investigadores examinaron los registros de pacientes dados de alta en hospitales nacionales entre 1988 y 2008, en busca de pacientes de 40 años o más que hubiesen perdido un dedo del pie, un pie o una pierna debido a la diabete. Hallaron que, aunque el número de personas afectadas por la enfermedad se triplicó con creces en esas dos décadas, las amputaciones de pies y piernas declinaron después de 1996.
Los investigadores también observaron los casos de personas sin diabetes y hallaron que las tasas de amputaciones no habían variado. Los expertos atribuyen la baja a la vigilancia estrecha y a la mayor educación de los pacientes. También puede deberse a que el seguro Medicare empezó a pagar los exámenes de azúcar en la sangre, zapatos protectores y otros dispositivos médicos para los diabéticos de mayor edad.