Esta es la pregunta que se plantearon los investigadores de un estudio reciente publicado en la revista científica British Medical Journal.

El estudio, que se llevó a cabo en varios países europeos, incluyó a más de 1 millón de personas y se centró en la relación entre el consumo de café y el riesgo de diabetes tipo 2.

Según los datos de los sujetos analizados en el estudio,  las personas que bebían al menos una taza de café al día tenían un 12% menos de probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2 que aquellas que no bebían café.

De esta forma, los resultados mostraron que el efecto protector del café se mantuvo incluso después de tener en cuenta otros factores de riesgo para la diabetes, como la edad, el índice de masa corporal (IMC) y el consumo de alcohol y tabaco.

Sin embargo, los autores del estudio también advierten que el café solo no es una solución mágica para prevenir la diabetes tipo 2.

Tal y como señalan los expertos, es importante llevar un estilo de vida saludable y equilibrado.  Esto incluye una dieta saludable, ejercicio regular y mantener un peso saludable.

Además, las personas que tienen problemas para conciliar el sueño, que experimentan ansiedad o que son sensibles a la cafeína deberían hablar con su médico antes de aumentar su consumo de café.