Un plan nacional contra la diabetes en España que iguale el acceso al tratamiento de cualquier persona con diabetes en España. Eso es lo que hace falta para hacer frente al reto sanitario que supone hoy en día la diabetes en nuestro país. Este ha sido uno de los mensajes claves en la presentación del XXVII nacional de la Sociedad Española de Diabetes que se ha presentado esta mañana en Bilbao y que se prolongará durante los próximos 3 días.

Sin duda el reto más complejo que aún queda en la lucha contra la diabetes pasa por la prevención y el diagnóstico precoz de la enfermedad. En el caso de la prevención, desde la SED se plantea la necesidad de llevar a cabo un abordaje desde todos los ámbitos de la sociedad y apoyado en un plan nacional contra la diabetes, con la participación lo más amplia posible de todos los colectivos implicados.

En cuanto al diagnóstico, se reconoce que ha mejorado en los últimos años, gracias a la creciente sensibilización desde Atención Primaria, pero aún se estima que en España más del 45% de las personas con diabetes están sin diagnosticar.

También desde la SED se apunta un cierto déficit en el acceso de las personas con diabetes a los mejores recursos disponibles actualmente para facilitar la monitorización de la glucosa y el manejo terapéutico de la diabetes, algo que debería estar incluido en ese plan nacional contra la diabetes.

Como exige el presidente de la Sociedad Española de Diabetes, deberíamos garantizar el acceso a las nuevas tecnologías de monitorización de la glucemia y a los nuevos tratamientos de la enfermedad para todo aquel que lo necesite y de una forma igualitaria entre personas y entre territorios, ya que, según añade el Jefe del Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario Central de Asturias, “hay diferencias entre Comunidades que no tienen explicación, incluso en el acceso a los nuevos fármacos o los nuevos métodos de monitorización”; por eso, reclama “uniformar el acceso de todos los pacientes a la tecnología necesaria para lograr un tratamiento moderno y adecuado para el buen control de la enfermedad”.

Un ejemplo paradigmático es el de los sistemas de monitorización de la glucemia. Para el Dr. Edelmiro Menéndez, no cabe duda que “los nuevos sistemas de monitorización están ya maduros, son fiables, han demostrado su utilidad para conseguir un mejor control de la diabetes y mejor calidad de vida para las personas con diabetes, sobre todo asociados a las bombas de infusión de insulina”. Por tanto, afirma, es el momento de plantearse su financiación y esa es nuestra petición a la Administración”.

En cualquier caso, como aclara la Dra. Sonia Gaztambide, Jefa del Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario Cruces (Bilbao), no todas las personas están dispuestas ni tienen capacidad para utilizar este recurso; además, se trata de una tecnología más cara, por lo que es indispensable buscar la eficiencia máxima seleccionando las indicaciones más idóneas para su uso”.

Más allá al plan nacional contra la diabetes

Desde la Sociedad Española de Diabetes (SED) también se pone el acento en la necesidad de invertir más en la educación terapéutica en diabetes, “especialmente en aquellas personas con mayor riesgo de tener diabetes, pero que también debe llegar a todas las personas con diabetes sin excepción”, apostilla su presidente, quien asegura que “éste es instrumento fundamental para mejorar el autocuidado”.

Actualmente, se están implementando en España importantes cambios en los modelos de atención a los pacientes con diabetes, en un proceso de integración con Atención Primaria, haciendo más partícipes a las personas con diabetes de su tratamiento y con un incremento del abanico de fármacos para su tratamiento (facilitando de forma consistente un buen control glucémico y de otros factores de riesgo vascular). Pero, en palabras de la Dra. Sonia Gaztambide, presidenta del Comité Organizador de este Congreso, “el cambio más significativo que se está produciendo es que los pacientes son más conscientes de que necesitan implicarse en su tratamiento; por ello, recalca, “debemos de insistir en convencer a la sociedad general de la importancia de un estilo de vida saludable, con una alimentación adecuada y una práctica regular de ejercicio, para combatir la obesidad y la diabetes tipo 2”.

En este sentido, la Dra. Gaztambide reconoce que “las nuevas tecnologías pueden ayudar a educar a los pacientes en la realización de una alimentación y un ejercicio adecuado”. En el caso de los niños, se insiste especialmente en luchar contra la obesidad infantil, incidiendo en la necesidad de una dieta sana sin comida “basura” ni precocinados, implantando de nuevo la dieta mediterránea y extendiendo la realización de ejercicio físico, limitando la utilización de videojuegos, tabletas o teléfonos móviles, así como las horas de TV.