Cada vez es una realidad más palpable el hecho de que el futuro del control glucémico pasará por los sensores. El último hecho que avala está afirmación lo vivimos el pasado jueves día 21 de julio. La semana pasada el panel de expertos de la administración federal de los Estados Unidos para los Alimentos y Medicinas, sobradamente conocida por sus siglas FDA (Foods and Drugs Administration), aprobó por abrumadora mayoría el uso no adyuvante del Monitor Continuo de Glucosa Dexcom G-5.

Esto significa que las personas con diabetes que utilizan este monitor pueden tomar decisiones terapéuticas solo con los datos del mismo sin necesidad de confirmar con glucemias capilares. Es el único dispositivo que ha recibido esta aprobación. Esto sin duda es un avance para las personas con diabetes que podrían ir olvidando los molestos pinchazos diarios.

El Dexcom G5 mide de manera continua y sin intervención del usuario la glucosa y los datos se envían a un teléfono móvil. Se pueden programar alertas y alarmas  de manera que se reciben avisos cuando se alcanzan valores no deseados, evitando sobre todo las temidas hipoglucemias. Los datos se envían a la nube y pueden ser captados por hasta cinco posibles cuidadores; así por ejemplo los padres de niños con diabetes pueden tener en el momento la información de la glucosa de sus hijos, aún estando muy lejos de ellos y decidir medidas correctoras  si es necesario.

El uso no adyuvante ahora aprobado en los Estados Unidos está vigente en Europa desde el pasado otoño.

El Dexcom G5 se distribuye en España por Novalab Ibérica, empresa que viene distribuyendo los Monitores Continuos de Glucosa Dexcom  desde hace algunos años  y concretamente el Dexcom G5 desde hace pocos meses.

Novalab Ibérica es una empresa de reciente adquisición por Air Liquide Healthcare que con esta iniciativa reafirma el compromiso corporativo de ayudar en la mejora de la salud de los enfermos crónicos en España.